Marta Huerta de Aza y el VAR, protagonistas negativos en la derrota del Cartagena

El FC Cartagena salió de El Plantío con una derrota por 3-1 ante el Burgos CF, pero más allá del resultado, el partido estuvo marcado por una serie de decisiones arbitrales que dejaron a los visitantes con un sabor amargo y la sensación de haber sido claramente perjudicados. La colegiada Marta Huerta de Aza, en su histórico debut como la primera mujer en dirigir un partido en el fútbol profesional masculino español, estuvo en el centro de la polémica debido a sus decisiones, algunas de las cuales resultaron clave en el desenlace del encuentro.

 

El Cartagena comenzó el partido con buen pie, adelantándose en el marcador gracias a un gol de Sergio Guerrero, que aprovechó un descuido de la defensa burgalesa para marcar. Sin embargo, a partir de ahí, las decisiones arbitrales empezaron a jugar un papel determinante. Los jugadores y el cuerpo técnico del Cartagena manifestaron su descontento desde el primer momento, cuando la árbitra permitió que el Burgos igualara el marcador a pesar de un posible fuera de juego en la jugada previa al gol de Fer Niño.

La situación empeoró en el segundo tiempo, cuando el Cartagena, en busca del empate, se vio frustrado por lo que consideraron una serie de decisiones erróneas del VAR, supervisado también por Marta Huerta de Aza. La más controvertida de todas ocurrió en el tiempo añadido, cuando Cuñat derribó a Iñigo Córdoba en el área y la árbitra señaló un penalti a favor del Burgos. Los jugadores del Cartagena reclamaron vehementemente una falta previa sobre uno de sus defensores, que, según ellos, no fue revisada adecuadamente por el VAR. El penalti, ejecutado por Curro, sentenció el 3-1 final y dejó al Cartagena sin opciones de remontar.

Pero la polémica no terminó ahí. En los últimos instantes del partido, el Cartagena pidió un penalti por una mano dentro del área de un defensor burgalés. Tras revisar la jugada en el VAR, Huerta de Aza decidió no conceder el penalti, lo que desató la indignación del conjunto visitante, que consideró esta decisión como un claro perjuicio y la guinda a una actuación arbitral que, a su juicio, estuvo lejos del nivel requerido para un partido de esta categoría.

Al término del encuentro, el técnico del Cartagena no ocultó su frustración y, aunque evitó críticas directas a la árbitra, dejó entrever su malestar por cómo se había gestionado el partido desde el punto de vista arbitral. "Hay situaciones que no podemos controlar, pero esperemos que en el futuro estas decisiones no influyan tanto en el resultado", comentó con visible descontento.

En resumen, el Cartagena salió derrotado no solo en el marcador, sino también en la confianza en la justicia deportiva, con la sensación de que las decisiones arbitrales y del VAR jugaron en su contra en momentos cruciales. Un debut complicado para Marta Huerta de Aza, que, en su primer partido en el fútbol profesional masculino, dejó más preguntas que respuestas sobre su capacidad para manejar encuentros de alta exigencia.